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miércoles, 5 de septiembre de 2007

Entrevista a la Dra Deyanira Puche Fernández



La detección temprana es la única garantía de tener un bebé sano

El VIH durante el embarazo, parto y postparto

El Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), responsable del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), es en la actualidad objeto de estudio científico alrededor de todo el mundo con la finalidad de conseguir la cura a una enfermedad que ha azotado a la humanidad y ha diezmado poblaciones enteras en países pobres del continente africano.

Íntima conversó con la Dra. Deyanira Puche Fernández, Infectóloga especialista en SIDA para aclarar a todas nuestras lectoras las implicaciones que tiene el VIH durante el embarazo y después, y que así conozcan que no todas son malas noticias para las madres infectadas por el temible virus, ya que con un tratamiento oportuno, las posibilidades de contagiar al bebé se ven disminuidas a sólo un 8 por ciento de los casos.

¿Qué significa tener VIH - SIDA?
Cuando el VIH ingresa en el torrente sanguíneo de una persona, el organismo comienza a producir anticuerpos para defenderse del virus. Si se detecta la presencia de estos anticuerpos mediante un análisis de sangre, se considera que la persona es “seropositiva”, aunque no implica necesariamente que tenga SIDA. Las personas seropositivas están infectadas con el virus y pueden transmitirlo a otros y, aún sin tratamiento, estos individuos pueden tardar 10 años o más en desarrollar la enfermedad. Una vez que se le diagnostica SIDA, el paciente presenta un sistema inmunológico en extremo vulnerable y se vuelve más propenso a contraer infecciones, ciertos tipos de cáncer y otras enfermedades que pueden poner en peligro su vida e incluso causarle la muerte.

¿Cómo hablar con las madres acerca del SIDA?
Antes que nada es importante mencionar que acerca del SIDA se les debe hablar a todos, a los niños en las escuelas, a los adolescentes, a los adultos, a todos. Es importante recordar que el virus se transmite a través de las relaciones sexuales o de la exposición a sangre infectada, por lo tanto una mujer con VIH puede transmitir el virus a su bebé durante el embarazo (en la placenta), el parto (a través del canal vaginal) o la lactancia materna, es por ello de suma importancia que toda mujer que esté planificando un embarazo conozca si tiene VIH antes de concebir, y si ya está embarazada se haga la prueba, ya que de resultar seropositiva, existen tratamientos efectivos para que su bebé nazca sin el virus, y esto es una herramienta fundamental para evitar que la enfermedad se siga propagando.

Un estudio realizado por el gobierno norteamericano en 1994 demostró que un tratamiento a base de fármacos durante el embarazo puede reducir enormemente el riesgo de que una madre infectada con VIH transmita el virus a su bebé. Desde entonces, el número de bebés infectados de esta manera ha disminuido en un ochenta por ciento, es por ello que los obstetras en todo el mundo recomiendan a las mujeres embarazadas hacerse una prueba de VIH voluntaria como parte de sus controles prenatales de rutina.

En Venezuela, no se tienen cifras con respecto a este particular, el único dato que manejamos del Ministerio de Salud y Desarrollo Social es un estimado de 13.527 personas – hombres y mujeres- con VIH hasta el 2002, pero éste número sólo corresponde a los individuos que reciben tratamiento; por lo tanto las cifras no resultan concluyentes.

¿Cómo se infectan las mujeres?
La forma más común de contagio son las relaciones heterosexuales sin protección - es decir, sin usar preservativo- con una persona infectada. Cifras de Estados Unidos de Norteamérica estiman que aproximadamente el 75 por ciento de las mujeres infectadas obedece a esta causa mientras que el 25 por ciento se produce al inyectarse drogas con jeringas compartidas. La comunidad médica considera que en proporción estas cifras son extrapolables a los países en vías de desarrollo.

¿Qué tratamiento deben recibir las mujeres con VIH/SIDA durante el embarazo?
Por lo general, las personas con VIH/SIDA reciben un tratamiento basado en diferentes combinaciones de fármacos que retardan la propagación del VIH por el organismo, mantienen baja la concentración de virus en la sangre (o incluso indetectable) y ayudan a prevenir las infecciones relacionadas con el SIDA. Los infectólogos recomendamos tratar a las mujeres embarazadas infectadas con VIH con estos fármacos como si no estuvieran embarazadas, aunque la medicación puede modificarse según sea necesario en cada caso.

¿En qué momento del embarazo comienza en tratamiento contra el VIH?
El tratamiento con fármacos se realiza desde comienzos del segundo trimestre, o en cuanto sea posible dentro de esa etapa, hasta el final del embarazo, el pre-parto y el parto. El bebé también debe ser tratado con medicamentos contra el VIH durante las primeras seis semanas de vida. Está comprobado que este tipo de tratamientos reducen en dos tercios el riesgo de infección del bebé.

¿Los tratamientos para el VIH pueden causar riesgos para el desarrollo del bebé?
En algunos casos, el tratamiento se puede posponer hasta finales del segundo trimestre ya que los riesgos de los fármacos para el feto son menores. Las mujeres embarazadas infectadas que ya se están tratando con fármacos contra el VIH deben continuar con el tratamiento durante todo el embarazo. En algunos casos, el médico puede recomendarle algunos ajustes o cambios en la medicación. Evidencia médica arroja que los fármacos contra el VIH representan un riesgo muy bajo para el feto en todo el proceso y, aún en la administración de los fármacos durante las primeras semanas de vida del bebé, no se observan efectos que puedan comprometer su adecuado desarrollo

¿Cuáles son los cuidados especiales para prevenir la infección durante el parto?
Los estudios demuestran que se puede reducir significativamente el riesgo de transmitir el virus a su bebé sometiéndose a una cesárea ante de comenzar los trabajos de parto y romper fuentes. Así, el parto por cesárea, junto al tratamiento oportuno, minimizan la infección del bebé a un 2 por ciento o menos, no obstante se estima que más de 800,000 bebés en todo el mundo contraen el VIH a través del canal del parto cada año y 90% de estos casos se refieren a países en desarrollo, donde además de no existir el acceso masivo a los tratamientos, no hay instalaciones sanitarias adecuadas para practicar este tipo de procedimiento quirúrgico.

Los médicos también pueden recomendar otras precauciones para proteger al bebé. Por ejemplo, cuando el doctor sabe que una mujer es VIH positiva, puede evitar usar procedimientos que incrementan la exposición del feto a la sangre de la madre durante el embarazo, tales como la amniocentesis o toma de muestra del líquido amniótico.

¿Cuáles son los síntomas del VIH en los bebés?
Los bebés infectados con VIH parecen normales al nacer, pero alrededor del 15 por ciento desarrolla síntomas graves o muere antes del primer año de vida. Antes de los tratamientos combinados a base de fármacos, aproximadamente la mitad de los niños infectados con VIH moría antes de los nueve años. Sin embargo, estos tratamientos están mejorando las perspectivas para los niños infectados.

Los bebés de las mujeres con VIH deben someterse a las pruebas para detectar el virus dentro de las 48 horas de nacimiento. Estas primeras pruebas, permiten identificar aproximadamente el 40 por ciento de los bebés recién nacidos infectados. Por lo general, los médicos suelen repetir la prueba, lo cual permite identificar a la mayoría de los bebés infectados antes del mes de vida y prácticamente a todos antes de los seis meses. La prueba de diagnóstico precoz del VIH, que detecta la existencia de anticuerpos contra el virus, no es confiable en el caso de bebés nacidos de madres infectadas, ya que los anticuerpos de la madre pueden estar presentes en la sangre del bebé hasta 18 meses sin que éste se haya infectado.

Por último ¿Qué le recomendaría a las mujeres venezolanas?
Mi recomendación es la prevención, llevar una vida sexual responsable es la mejor herramienta para evitar el VIH, y en esta responsabilidad juegan un papel muy importante mantener una pareja estable y masificar el uso el preservativo y, en segundo lugar, recomiendo hacerse la prueba del VIH sobretodo si se planifica concebir o ya se está embarazada, aunque resulte una decisión que cause ansiedad, porque en la actualidad la medicina cuenta con una serie de fármacos que proporcionan al paciente seropositivo una buena calidad de vida y que pueden evitar que el bebé de una madre infectada nazca con el virus.



Foto Anne Geddes

Entrevista publicada en la REVISTA IMPACIENTES número 15 (2006)

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