Estilista Oficial del Miss Venezuela y Asesor de Imagen del Mister Venezuela
Jesús Morales: El Gurú del Estilismo
Un amplio local de reminiscencias neoclásicas, ubicado en el Centro San Ignacio, es el templo de Jesús Morales, quien frente a un monumental espejo, con secador, cepillo y tijeras, se dispone a crear sobre el cabello de los más bellos y bellas del país: artistas, modelos, reyes y reinas de la belleza criolla, quienes han le han dedicado efusivas palabras que han dejado inmortalizadas sobre sus fotos, imágenes perfectas que decoran el salón en marcos plateados y contemplan impasibles a los no tan perfectos que irrumpen en el recinto. Impacientes se acercó al este hombre de correctos modales, pausada conversación e imagen imponente, artífice del look memorable de aquellos que llenan nuestras pantallas, para conocer, además de su trayectoria, sus secretos y como utilizarlos a nuestro favor.
Vocación natural por la belleza
Evocando su infancia, Jesús Morales nos señala que su acercamiento al mundo de la belleza se dio de manera espontánea. Su hermana mayor era dueña de una peluquería y Jesús se crió dentro de ese ambiente, en el que pasaba la mayor parte de su tiempo libre después de asistir al colegio. Confiesa que en un principio, el arte del estilismo no había capturado su atención, pero si recuerda como ayudaba a los peluqueros con los cortes y peinados más complicados. Como anécdota curiosa nos relata: “Cuando yo tenía como ocho años, le dije a mi hermana que una clienta había quedado con un lado del cabello más corto y otro más largo, ella se sorprendió, no era mucha la diferencia y yo me había dado cuenta, ese fue mi punto de partida”. Desde de ese momento comenzó todo, Jesús visualizaba los peinados y los cortes que mejor le lucirían a las clientas, y, afirma “era muy perfeccionista, cuando yo quería algo que no salía como lo había imaginado, lo hacía de nuevo”. El descubrir este talento lo llevo a querer perfeccionarlo, lo cual lo convirtió en un observador acucioso de las técnicas de los peluqueros que estaban a su alrededor.
Parámetros para la creación
Este creador trabaja personalizadamente sobre cada hombre o mujer que llega a su salón. Señala que la textura del cabello es determinante, pero no hace ningún diagnóstico específico, solo aplica la visualización como herramienta para canalizar su “inspiración artística”. A veces le sucede que los deseos del cliente son opuestos a lo que el ha pensado, discrepancia que se soluciona conversando, aunque en la mayoría de los casos priva la confianza y aquellos que se ponen en sus manos se dejan asesorar. Indica que por ser el cabello el marco de rostro, éste debe ir en consonancia con las facciones, el color de los ojos y de la piel, y hasta con la personalidad. Este último aspecto, el interno, sólo lo logra descubrir cuando establece una relación de complicidad con sus clientes, lo cual considera ideal para que cualquier mujer obtenga resultados óptimos a la hora de ir a la peluquería.
Morales también trabaja creando caracterizaciones para televisión, no es exclusivo de ninguna planta y hace trabajos para todos los canales, se considera más bien “exclusivo de los artistas y de los directores artísticos a quienes les gustan mucho los resultados de mi trabajo”.
El zar de la belleza Osmel Sousa confía ciegamente en su experiencia y le da total libertad para crear la imagen de las aspirantes de la corona más codiciada del país, sobre las cuales despliega toda su creatividad. Comenta que muchas ex misses que deciden cambiarse el color del cabello después del concurso, regresan a él años más tarde porque se convencen de que el look que les creó es el que mejor les queda. En el caso de los aspirantes a Mister Venezuela, Jesús trabaja bajo la dirección de Osmel porque el hombre está más reacio a los cambios aunque suelan ser menos drásticos y “se debe conservar una imagen varonil en cada concursante”. Para Morales “el estilismo trasciende lo estético, comunica la personalidad” y tanto en las misses como en los misters le toca traducir eso en su imagen, es por ello que no se considera infalible y opina que sus mejores resultados se han dado después de algún tiempo de trato con el cliente, en el que descifra hasta donde puede cambiarlo para que potencie sus atributos personales, no sólo externos, sino internos.
La faceta pedagógica
Jesús Morales también se desempeña como asesor, desde hace 25 años, del Grupo Sandro a nivel nacional. Esta cadena de franquicias, ha sido y es una base determinante en su carrera. Narra que cuando comenzó con ellos tenían sólo 4 salones y hoy cuentan con 47. Su contribución en el crecimiento y fortalecimiento de la compañía se evidencia en la percepción actual que las venezolanas tienen de la marca: “hoy en día Sandro es sinónimo de peluquerías de calidad con larga trayectoria, accesibles, presentes en los principales centros comerciales del país, que ofrecen excelente servicio”. Además, es responsable del centro de formación de este grupo donde se imparten conocimientos a los jóvenes que se inician como estilistas acerca de técnicas de peluquería, nuevas tendencias y atención al cliente. Actualmente el centro cuenta con cerca de 1500 alumnos.
En actualización permanente
Este profesional de la belleza considera que la educación es muy importante y que el ser humano no tiene límites para aprender cada día. Viaja constantemente al exterior del país – más de 12 veces al año - para palpar y experimentar distintas culturas, así como para apreciar la belleza desde distintas ópticas. Se confiesa amante de la moda, la observa constantemente, y sus destinos favoritos son Los Ángeles, Nueva York y París. Al viajar siente que se actualiza y aprende del entorno nuevas cosas que trae a sus clientas y clientes, quienes, dice: “aprecian mucho que estés actualizado” y además aplica estos conocimientos en su labor formativa.
Entre sus planes se encuentra la expansión de sus salones – actualmente cuenta con dos: uno en el Centro Sambil y uno en el Centro San Ignacio- a una cadena con su nombre que brinde la misma calidad de servicio. El plan de este año es abrir su tercer salón y lanzar su línea profesional de cuidado capilar de venta exclusiva en sus peluquerías.
Los Consejos del Experto
Impacientes no podía perder la oportunidad de hacer confesar a Jesús Morales, Gurú del Estilismo, los secretos para que todas tengamos una melena sexy de Miss Venezuela.
- Establece una relación con tu estilista que perdure en el tiempo. Saltar de una peluquería a otra no te da la oportunidad de conocer al profesional que tratará tu cabello y para el cual es importante saber más de ti. Sólo eso garantizará que él encuentre un corte adaptado a tu estilo y personalidad única.
- Déjate asesorar, el estilista es un artista en el que debes confiar y que mientras más te conozca, más sabe lo que mejor te queda. Además, puede darte muchos consejos para potenciar tu look.
- Es importante que te sientas bien. El mejor estilo es aquel que te hace sentir femenina y seductora.
- Si tienes una amiga con un corte de cabello que te gusta y tu no cuentas con un peluquero de confianza, pregúntale quien es. Para nosotros los estilistas nuestros resultados son la mejor publicidad.
- A la hora de elegir los productos para tu cuidado capilar, pregúntale a tu estilista, él es la persona más idónea para recomendarte aquellos que te darán los mejores resultados. Existen opciones adaptadas a tu presupuesto.
- Al comprar Shampoo y Acondicionador elige aquellos para tu tipo de cabello: seco, graso, teñido, liso o rizado. El producto puede ser muy bueno, pero si no es el adecuado para ti no te sentará bien.
- Si vas de vacaciones a la playa no olvides adquirir una línea de cuidado solar para el cabello. El sol, la sal del mar y el cloro de las piscinas resecan mucho el cabello y debes protegerlo bien.
- Si deseas cambiar el color o la textura de tu cabello acude a tu salón de belleza de confianza. Los productos químicos sólo deben ser usados por profesionales y aplicados en casa pueden producir daños difíciles de reparar.
Jesús Morales: El Gurú del Estilismo
Un amplio local de reminiscencias neoclásicas, ubicado en el Centro San Ignacio, es el templo de Jesús Morales, quien frente a un monumental espejo, con secador, cepillo y tijeras, se dispone a crear sobre el cabello de los más bellos y bellas del país: artistas, modelos, reyes y reinas de la belleza criolla, quienes han le han dedicado efusivas palabras que han dejado inmortalizadas sobre sus fotos, imágenes perfectas que decoran el salón en marcos plateados y contemplan impasibles a los no tan perfectos que irrumpen en el recinto. Impacientes se acercó al este hombre de correctos modales, pausada conversación e imagen imponente, artífice del look memorable de aquellos que llenan nuestras pantallas, para conocer, además de su trayectoria, sus secretos y como utilizarlos a nuestro favor.
Vocación natural por la belleza
Evocando su infancia, Jesús Morales nos señala que su acercamiento al mundo de la belleza se dio de manera espontánea. Su hermana mayor era dueña de una peluquería y Jesús se crió dentro de ese ambiente, en el que pasaba la mayor parte de su tiempo libre después de asistir al colegio. Confiesa que en un principio, el arte del estilismo no había capturado su atención, pero si recuerda como ayudaba a los peluqueros con los cortes y peinados más complicados. Como anécdota curiosa nos relata: “Cuando yo tenía como ocho años, le dije a mi hermana que una clienta había quedado con un lado del cabello más corto y otro más largo, ella se sorprendió, no era mucha la diferencia y yo me había dado cuenta, ese fue mi punto de partida”. Desde de ese momento comenzó todo, Jesús visualizaba los peinados y los cortes que mejor le lucirían a las clientas, y, afirma “era muy perfeccionista, cuando yo quería algo que no salía como lo había imaginado, lo hacía de nuevo”. El descubrir este talento lo llevo a querer perfeccionarlo, lo cual lo convirtió en un observador acucioso de las técnicas de los peluqueros que estaban a su alrededor.
Parámetros para la creación
Este creador trabaja personalizadamente sobre cada hombre o mujer que llega a su salón. Señala que la textura del cabello es determinante, pero no hace ningún diagnóstico específico, solo aplica la visualización como herramienta para canalizar su “inspiración artística”. A veces le sucede que los deseos del cliente son opuestos a lo que el ha pensado, discrepancia que se soluciona conversando, aunque en la mayoría de los casos priva la confianza y aquellos que se ponen en sus manos se dejan asesorar. Indica que por ser el cabello el marco de rostro, éste debe ir en consonancia con las facciones, el color de los ojos y de la piel, y hasta con la personalidad. Este último aspecto, el interno, sólo lo logra descubrir cuando establece una relación de complicidad con sus clientes, lo cual considera ideal para que cualquier mujer obtenga resultados óptimos a la hora de ir a la peluquería.
Morales también trabaja creando caracterizaciones para televisión, no es exclusivo de ninguna planta y hace trabajos para todos los canales, se considera más bien “exclusivo de los artistas y de los directores artísticos a quienes les gustan mucho los resultados de mi trabajo”.
El zar de la belleza Osmel Sousa confía ciegamente en su experiencia y le da total libertad para crear la imagen de las aspirantes de la corona más codiciada del país, sobre las cuales despliega toda su creatividad. Comenta que muchas ex misses que deciden cambiarse el color del cabello después del concurso, regresan a él años más tarde porque se convencen de que el look que les creó es el que mejor les queda. En el caso de los aspirantes a Mister Venezuela, Jesús trabaja bajo la dirección de Osmel porque el hombre está más reacio a los cambios aunque suelan ser menos drásticos y “se debe conservar una imagen varonil en cada concursante”. Para Morales “el estilismo trasciende lo estético, comunica la personalidad” y tanto en las misses como en los misters le toca traducir eso en su imagen, es por ello que no se considera infalible y opina que sus mejores resultados se han dado después de algún tiempo de trato con el cliente, en el que descifra hasta donde puede cambiarlo para que potencie sus atributos personales, no sólo externos, sino internos.
La faceta pedagógica
Jesús Morales también se desempeña como asesor, desde hace 25 años, del Grupo Sandro a nivel nacional. Esta cadena de franquicias, ha sido y es una base determinante en su carrera. Narra que cuando comenzó con ellos tenían sólo 4 salones y hoy cuentan con 47. Su contribución en el crecimiento y fortalecimiento de la compañía se evidencia en la percepción actual que las venezolanas tienen de la marca: “hoy en día Sandro es sinónimo de peluquerías de calidad con larga trayectoria, accesibles, presentes en los principales centros comerciales del país, que ofrecen excelente servicio”. Además, es responsable del centro de formación de este grupo donde se imparten conocimientos a los jóvenes que se inician como estilistas acerca de técnicas de peluquería, nuevas tendencias y atención al cliente. Actualmente el centro cuenta con cerca de 1500 alumnos.
En actualización permanente
Este profesional de la belleza considera que la educación es muy importante y que el ser humano no tiene límites para aprender cada día. Viaja constantemente al exterior del país – más de 12 veces al año - para palpar y experimentar distintas culturas, así como para apreciar la belleza desde distintas ópticas. Se confiesa amante de la moda, la observa constantemente, y sus destinos favoritos son Los Ángeles, Nueva York y París. Al viajar siente que se actualiza y aprende del entorno nuevas cosas que trae a sus clientas y clientes, quienes, dice: “aprecian mucho que estés actualizado” y además aplica estos conocimientos en su labor formativa.
Entre sus planes se encuentra la expansión de sus salones – actualmente cuenta con dos: uno en el Centro Sambil y uno en el Centro San Ignacio- a una cadena con su nombre que brinde la misma calidad de servicio. El plan de este año es abrir su tercer salón y lanzar su línea profesional de cuidado capilar de venta exclusiva en sus peluquerías.
Los Consejos del Experto
Impacientes no podía perder la oportunidad de hacer confesar a Jesús Morales, Gurú del Estilismo, los secretos para que todas tengamos una melena sexy de Miss Venezuela.
- Establece una relación con tu estilista que perdure en el tiempo. Saltar de una peluquería a otra no te da la oportunidad de conocer al profesional que tratará tu cabello y para el cual es importante saber más de ti. Sólo eso garantizará que él encuentre un corte adaptado a tu estilo y personalidad única.
- Déjate asesorar, el estilista es un artista en el que debes confiar y que mientras más te conozca, más sabe lo que mejor te queda. Además, puede darte muchos consejos para potenciar tu look.
- Es importante que te sientas bien. El mejor estilo es aquel que te hace sentir femenina y seductora.
- Si tienes una amiga con un corte de cabello que te gusta y tu no cuentas con un peluquero de confianza, pregúntale quien es. Para nosotros los estilistas nuestros resultados son la mejor publicidad.
- A la hora de elegir los productos para tu cuidado capilar, pregúntale a tu estilista, él es la persona más idónea para recomendarte aquellos que te darán los mejores resultados. Existen opciones adaptadas a tu presupuesto.
- Al comprar Shampoo y Acondicionador elige aquellos para tu tipo de cabello: seco, graso, teñido, liso o rizado. El producto puede ser muy bueno, pero si no es el adecuado para ti no te sentará bien.
- Si vas de vacaciones a la playa no olvides adquirir una línea de cuidado solar para el cabello. El sol, la sal del mar y el cloro de las piscinas resecan mucho el cabello y debes protegerlo bien.
- Si deseas cambiar el color o la textura de tu cabello acude a tu salón de belleza de confianza. Los productos químicos sólo deben ser usados por profesionales y aplicados en casa pueden producir daños difíciles de reparar.
Foto cortesía de www.englishpeopledaily.cn
ENTREVISTA PUBLICADA EN LA REVISTA IMPACIENTES - ABRIL DE 2007
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